POR SI ALGUNO todavía tuviera dudas y pensara que en verdad la banca privada es una institución amiga de la sociedad, con valores y objetivos en pro de la ciudadanía, en favor de la familia mexicana para apoyarla, para darle la mano y ayudarla a progresar y hacerse de un patrimonio sólido y un futuro prometedor y brillante para padres, hijos y demás descendientes, tal cual la retrata la publicidad que por miles de millones de pesos paga en prensa, radio y sobre todo televisión; le tenemos una noticia: ayer el presidente de la Asociación de Bancos de México, Luis Niño de Rivera, se encargó de quitarse y quitarles la máscara de prohombres a todos los dueños y socios de estos negocios con ganancias insultantes en México, un país con millones de pobres y millones y millones de mexicanos que se parten el lomo para subsistir en el día a día y que son parte de la clientela a la que exprimen cotidianamente los banqueros…

SEGÚN PUBLICAN hoy importantes diarios nacionales como La Jornada y estatales como Vanguardia, la Asociación de Bancos de México (ABM) rechazó la posibilidad de sacrificar parte de sus utilidades para hacer quitas a las deudas de los usuarios que se han visto afectados por la crisis económica derivada de la pandemia de Covid-19, como lo planteó la Secretaría de Hacienda la semana pasada. En efecto ante la petición del gobierno mexicano vía Hacienda y de la Comisión Nacional Bancaria y de Valores de que se les hicieran quitas a los deudores de la banca, miles de los cuales perdieron el empleo como consecuencia de la pandemia, los dueños de los bancos de inmediato enseñaron el cobre y mostraron su falta de solidaridad con el pueblo mexicano…

“NO SE TRATA de sacrificar las utilidades de los bancos; se trata de mantener la solvencia de las instituciones bancarias, ese es el punto”, dijo este martes Luis Niño de Rivera, presidente de la Asociación de Bancos de México. “No es que ahora los dueños van a regalar dinero porque ganan mucho dinero. Las utilidades de la banca en lo que va de este año se han contraído sustancialmente”, agregó, en una declaración que como ya anotamos, al tiempo que deja ver su falta de solidaridad con sus clientes, los retrata de pies a cabeza como personajes que no están dispuestos a perder un peso de las enormes ganancias que obtienen y que el gobierno mexicano les ha permitido ganar explotando a la clientela mexicana, porque basta con comparar las comisiones que aquí cobran con las que cobran en otros países, para comprobar esto, además de que todos los servicios son más caros aquí que en otras naciones, como por ejemplo el manejo de las tarjetas de crédito…

Y ESO DE QUE “las utilidades de la banca en lo que va de este año se han contraído sustancialmente” como lo afirma Niño de Rivera, difícilmente alguien se lo va a creer, dada la forma en la que los dueños de los bancos se han comportado durante la pandemia, sobre todo en los picos más altos, al grado tal de que pudiera ser que muchos de los contagios de coronavirus, pudieran ser hasta miles, hayan sido responsabilidad de la banca y de las autoridades gubernamentales que, sospechosamente no metieron en cintura a los banqueros…

A QUÉ NOS referimos? A que siendo la actividad bancaria esencial, los dueños del dinero cerraron muchas de las sucursales de todos los bancos, de todos, en todo México, para ahorrarse sueldos de empleados y funcionarios por cientos y miles, pago de servicios como luz, agua, limpieza y seguridad, de manera que al tener menos gastos las ganancias que tuvieron forzosamente debieron ser mayores porque el servicio financiero que se prestó fue el mismo pero en muy pocos bancos y con muy poco personal. Ahí estuvo el daño terrible a la población, a la clientela se le obligó a hacer colas de hasta dos cuadras, durar parados, sin guardar la sana distancia durante tres a cuatro horas y muchos de ellos sin cubrebocas. No queremos ni imaginarnos cuantos contagios de covid-19 se dieron en los bancos, menos imaginarnos cuantos llegaron a terapia intensiva y cuántos pasaron a las estadísticas de muertos…

CON TODO Y esto, en una videoconferencia de prensa, Luis Niño de Rivera sostuvo que las nuevas medidas presentadas por Hacienda y la Comisión Nacional Bancaria y de Valores (CNBV) no son obligatorias, puesto que el otorgamiento de los créditos se hizo banco por banco y cliente por cliente. Además, apuntó, es necesario que los clientes cuiden su historial para que una vez que termine la coyuntura actual puedan tener acceso a una fuente de financiamiento invaluable. Agregó que las quitas son una práctica ancestral de la banca, cuando no hay alternativa es a lo que se recurre. Pero tenemos ahora sociedades de información crediticia (buró de crédito) que dejan en claro la situación del cliente…

LA SEMANA pasada, la Secretaría de Hacienda y la CNBV anunciaron medidas regulatorias para permitir a los bancos apoyar a sus clientes que, por la crisis, enfrentan dificultades para pagar sus deudas en las condiciones originalmente pactadas. Entre las medidas dadas a conocer por el titular de Hacienda, Arturo Herrera, y el presidente de la CNBV, Juan Pablo Graf, se cuentan: reducir el pago de mensualidades al menos 25 por ciento, aumentar el plazo de pago hasta en 50 por ciento del contratado inicialmente, reducir tasas de interés y hacer quitas al capital adeudado…

NIÑO DE RIVERA recordó que la banca, por medio del programa que aplaza el pago de créditos por cuatro o seis meses sin cobro de intereses moratorios, iniciado en abril, puso sobre la mesa 4.5 por ciento del PIB. Esto es, no cobró capital por un billón de pesos, y no cobró intereses por 69 mil millones de pesos. Eso no es un tema menor, no hay otro gremio, ni del sector público ni del privado, que haya puesto tanto dinero en la mesa para ayudar a la clientela. “La banca no cobró esos créditos entre abril y septiembre, pero los deudores tendrán que pagar, tanto el capital como los intereses, a partir de octubre”. Lo que se le olvidó decir es que los deudores, todos, ahora tienen que pagar un abono mayor al que se habían comprometido y lo peor, es que con ese abono, no les alcanza ni un solo peso para que se lo acrediten al capital, de manera es que o renegocian o nunca terminarán de pagar y renegociar es Re-Negociar, es decir, otra ganancia mayor para los banqueros que representa. Como dicen en el barrio, “no tienen llenadera”…

MIENTRAS TANTO y como parte de la intención de los dueños del dinero de tener a todos los mexicanos cautivos, Carlos Serrano, economista del Grupo BBVA, está proponiendo la adopción de medidas que se han aplicado en países nórdicos, como la eliminación de billetes de alta denominación, porque según él tendrían un efecto positivo en la disminución de uso de efectivo por la población y que realice todas sus operaciones económicas a través de la banca, además que incidirán en menos actos delictivos. Este piensa igualito que Santiago Nieto, el comandante de la Gestapo mexicana, perdón, el titular de la UIF de la Secretaría de Hacienda, que quiere desaparecer los billetes de 500 pesos para que la delincuencia organizada ya no traslade tan fácilmente grandes cantidades de dinero y el lavado de dinero disminuya. Haga de cuenta que la 4T prohíbe la circulación de automóviles y acaban con los choques, los atropellamientos y las muertes que causan los choferes ebrios…

EL FUNCIONARIO de BBVA, expone que “Estos países -los nórdicos- han llegado al extremo de reducir muchos de los billetes en circulación. Creemos que México podría empezar por ahí, por ejemplo, eliminando los billetes de más alta denominación que son los que se utilizan en actividades de delincuencia, los que vemos que utilizan en actos de corrupción. El potencial es enorme. Podemos ir de un equilibrio que tenemos de 80% en pagos en efectivo, a uno al revés, como ocurre en los países nórdicos”, explicó el economista en jefe de la institución, Carlos Serrano. Nosotros decimos que si tan solo tuviéramos el sistema educativo de allá no habría necesidad de eso…

POR CIERTO, ni al brillante economista de los banqueros, ni a la pistola que congela cuentas más rápida de la 4T, se les ha ocurrido que los que lavan dinero en México si acaso son diez personas de cada mil que utilizan el sistema bancario o quizás menos y que incluso entre los lavadores se han encontrado a importantes ejecutivos bancarios que hoy forman parte del gobierno federal. Entonces porque pensar en “soluciones simplistas” que afectan a todos los mexicanos como la de desaparecer los billetes de 500, en lugar de ponerse a investigar de a deveras y castigar de a deveras a los delincuentes. Por qué quieren hacer que todo mundo dependa totalmente de los banqueros cuando éstos, visto está, no le han respondido a cabalidad y con honestidad a su clientela?… (GFA).-